Cuando pienso en ciencia, las primeras dos cosas que se viene a mi cabeza son, la proporción áurea y la teoría de supercuerdas. Para muchos tal vez estos dos temas sean algo nuevo, pero para el universo, es algo que ha existido siempre. En mi concepción, la naturaleza es perfecta en todo sentido y sus creaciones no son accidentales. Desde tiempos milenarios el ser humano se ha fascinado con los fenómenos naturales y siempre ha intentado darles respuesta, por lo que desde antes de Cristo, se las ingenió para encontrar en la perfección natural, una lógica numérica. El número áureo o proporción áurea se encuentra en toda la naturaleza, en los caparazones de los caracoles, en la disposición y el número de pétalos de una flor, en la distribución de las hojas a lo largo de los tallos para que las hojas de arriba no tapen tanto a las de abajo, en la distribución de las hojas alrededor de la flor…
…, en la formación de los copos de nieve y su forma estrellada, al igual que su semejanza a algunas flores…
…, en la forma como las arañas hacen su telaraña, en los frutas, verduras, en la relación entre el grosor de las ramas principales y el tronco de un árbol, en la forma de crecimiento de algunas plantas…
…, en la proporción de abejas macho y abejas hembra en un panal, en el ser humano, en fin, esta proporción aparece por todo lado en la naturaleza y no sólo en nuestro mundo sino también se aplica a todas las formas que se encuentran en el universo, galaxias, nebulosas, agujeros negros, estrellas, planetas… Algunas personas la llaman la proporción divina, y aunque yo no considero que sea el nombre adecuado, definitivamente siento que ésta proporción tampoco es accidental.
Y de las curiosidades de nuestro universo, la otra cosa que me hace pensar en ciencia es una teoría muy bonita, la de las «supercuerdas». Ésta es una teoría de física cuántica que dice que dentro de todas las partículas existentes hay cuerdas infinitesimalmente pequeñas que vibran (en más de las 4 dimensiones conocidas por los humanos (11 dimensiones dicen unos, 10 otros)) y que gracias a esta vibración, el mundo y la naturaleza es lo que es, mejor dicho, éstas cuerdas son las que, con su vibración, dan la energía a los electrones, ellos a los átomos, éstos a las moléculas y ya sabemos que la agrupación de moléculas hace la materia. Así que, éstas pequeñísimas cuerdas vibrantes son las encargadas de darle al mundo y a nosotros, la energía que nos hace vivir. Y aunque no se ha estudiado, me atrevería a decir que las cuerdas vibrantes que nos componen guardan también la proporción áurea.
Muy interesante la forma cómo abordaste el tema…La ciencia es un tema muy amplio y bello, guarda misterios y secretos…ojalá se aplicara para el bien de la humanidad y como lo digo en mi post, es un bendito regalo…Gracias por compartirnos esta publicación.
La magia de los números !! Muy interesante el tema.